Lost post.

Mentiría si dijera que soy un angelito, mentiría también si dijera lo contrario. Y hasta acá es lo más cuerdo que puedan leer de este post.

Ayer me asusté, me asusté de mi mismo. Me asusté pues me sentí como hace 14, casi 15 años, cuando era un muchacho inexperto lleno de ira y cólera. Pensé que esa parte de mi la había eliminado. Me asusté por que me creí capaz de mandar a la mierda a mi familia, por fin dejar de hacer que dependan de mi y alejarme todo lo posible para no volverlos a ver nunca más. Ya me había cansado de ser el único responsable de casa, de ser el único que se preocupa por mantener viva a la familia, estoy harto de tener este poder.

Estaba harto de escuchar tanto lamento, por que tengo que escuchar las quejas de todos y nadie me pregunta siquiera como me siento. Estoy harto de sentirme a la vez atado de manos, estoy harto de mentir, de sonreír hipócritamente, de tener que pelear por el honor de la persona que quiero, de ser el fracaso de mi vida, de ser la imagen de un padre que no tuve, de ser la sombra de mis compañeros, de no ser la persona que todos quieren que sea.

Me siento descompuesto, como si no funcionara bien, como si estuviese hecho de las mejores piezas pero que no doy lo que todos esperan de mí. Quiero huir, quiero terminar con todo esto, mis propios pensamientos me atacan y me asustó. Este es uno de mis otros dragones que no esperaba volver a ver. No quiero repetir la historia.