Cuando me entretengo en las noches.

Me gusta caminar de noche, pienso mucho en mi día, pienso en lo que haré al día siguiente (dependiendo de las tareas que no pueda realizar antes), en pocas palabras, acerca de todo. Ayer llegué a golpe de diez de la noche a casa de mi flaca, estaba cansado, algo sudado pues fui demasiado abrigado, el clima está cambiando pero yo no.

Entré al cuarto y la vi ahí, estática como si durmiera, no quise hacer ruido pues si lo hago… la que me espera. Me acerqué a ella y quise tocarla, me gusta hacerlo, pasar mi mano por su cuerpo como si tocara un pétalo de rosa. No aguanté y lo hice, la toqué y sentí esa electricidad que siempre he sentido desde que la compré. Es bueno que esa chispa permanezca hasta ahora.

No quise hacer mucho ruido como dije, así que traté de ponerme cómodo evitando hacer el más mínimo sonido. Me saqué la camisa y la colgué en la silla, me saqué el pantalón y lo doblé, ahora si me sentía cómodo, me eché en mi sitio de la cama a verla como estaba de lo más tranquila, mi obesa diosa de ébano. No es que me joda que sea obesa, las he visto más flacas, pero me he dado cuenta que mientras más flacas más caras son en conseguirse una. Me quedó con mi gordita rendidora. Callada es aburrida, cuando habla es mucho mejor, no pasó mucho tiempo para que la hiciera despertar. Mi flaca se había quedado dormida y pronto me empezó a acompañar.

Ella agarró el instrumento con el que le gusta entretenerse mientras lo hacemos, no lo voy a negar, pero me jode que lo haga. Lo tiene en una mano, luego lo coge con la otra, a veces lo deja descansar, pero al rato lo vuelve a agarrar. Cuando se va al baño se olvida que lo tenía y aprovecho para darle uso, pero la mayoría de veces ella no me deja. A veces pienso en que debería conseguir uno exclusivo para ella, yo quiero el mío, también me gusta jugar con el, me gusta tener el control. Lo que si me jode es que se lo lleve a la boca, como Muñeca (mi perra) que ya le dejó las marcas de sus dientes al mío, y como que eso incomoda después de todo el tiempo que le doy para cuidarlo. Mi hermana por ejemplo, le compró un forro, pero no es lo mismo, la sensibilidad no es la misma, incluso cuando yo lo he cogido me demoró en hacerlo cambiar. Les conté que mi flaca una vez me regaló uno? Era uno que no le servía y me lo legó, al menos a mí si me sirvió.

Y mientas pienso en ello, mi flaca lo sigue teniendo en su boca. A veces se lo quito, a veces lo escondo, pero a donde sea que lo ponga ella siempre lo encuentra. Me hace acordar a un pata que tengo que cuando va a mi casa a veces sin darse cuenta se sienta sobre el, lo más gracioso es que no lo siente cuando lo hace, a menos que se mueva.

Cuando estoy en la casa de mi vieja me doy la maratónica, me quedo hasta las cuatro de la mañana (a veces hasta más tarde) y no me canso. Podría verla toda la noche, pero sé que debo descansar y tengo que dejarla. Siempre nos quedamos dormidos juntos, hasta el día siguiente donde es la primera que me despierta. A veces me despierto más temprano que ella y solo me queda esperar. Admiro realmente esa fidelidad, me lo dijeron el día que me la regalaron.

Mi obesa diosa de ébano.

No sé ustedes, pero nunca pensé dedicarle un post a la tele y al control remoto. Desde que la tengo la utilizo como despertador y nunca ha fallado, aunque creo es hora de comprarme un nuevo control remoto pues Muñeca le dejó sus marcas y siempre para arrojándolo al suelo. Compraría el forro amortiguador que le compró mi hermana al suyo, pero es difícil de usar. Es mi única compañera ahora que me he quedado son PC en casa.

No es grande, pero me sirve hasta para utilizar el DVD.