Perfume: Historia de un blogger.

El lunes pasado un amigo se invitó a almorzar y como es costumbre en casa cuando hay visitas, sean amigos míos o de mis hermanas, siempre mi familia suele contar aquellas historias donde yo soy el protagonista de tamañas vergüenzas o hago cosas de las que no estoy muy orgulloso. Y esta vez fue una de ellas.

Para suerte mía, algunas de esas historias las he contado en mi blog, otras no. Por ejemplo de mi manía de no compartir cubiertos o utensilios con nadie de la casa. Es decir, si tomabas gaseosa de un vaso, yo nicaragua iba a utilizar el mismo vaso porque sino me “pasaban sus gérmenes”, lo mismo sucedía con los cubiertos. Eso es pasado, ya no hago eso, ahora huelo las cosas. Si me das un vaso, veo detenidamente que no tenga una mancha de grasa o sino lo huelo. Y yo sé que se ve feo que uno haga eso cuando le dan algo, sea lo que sea, pero en los últimos años se me ha dado por oler todo lo que encuentro en mi camino. Me sirven el almuerzo, lo huelo, cuando cocino, aspiró el aroma de la comida, cuando sacó mi ropa de la lavadora o la descuelgo (no tengo secadora) la huelo y así con todo lo que tenga a la mano. Mis almohadas, mi ropa usada (es que me gusta como huelo yo), el control remoto, mis manos después de rascarme los... codos. Todo, ahora hago que todo entré por mi nariz primero antes de probarlo. Y cuando digo todo, me refiero a todo.

Esa tarde, estábamos almorzando de lo más contentos y mi vieja le cuenta a mi amigo de aquella vez que me trajo una leche asada y yo la olí. Le pareció feo que lo hiciera y me lo criticó. Mi hermana, que es más candelera en estos asuntos, hizo un comentario tipo “solo falta que cuando conozca a alguna chica, también la huela”, lo que provocó un estallido de risas en la mesa, pero yo confirmé que si hacía eso, pues lo primero que me gusta sentir en esos casos es el humor de las personas.

Yo pensé que era normal, pero entendí, al menos entre las personas que estábamos ahí, que no era así. No es que me la pase como un sabueso olfateando a mis visitas o aprovechando el mínimo descuido de mis amigas eventuales para darle un narisazo para saber a que huele. No, no, no. Muchas veces el humor de una persona puede ser tan fuerte que se siente con su sola presencia y si se trata de alguna amiga con la que solo pasaré 3 o 4 horas encerrado en un telo de mala muerte, pues me tomo mi tiempo a explorar mi sentido del olfato en todo su esplendor. En pocas palabras, y a manera de que suene feo, excito mis terminaciones olfativas a su máximo esplendor en el ring de las cuatro. Y es que, si no me gusta el olor de la chica con la que estoy, pues simplemente no pasa nada. Por más que sea Eva Longoria, Giuliana Rengifo o cualquiera de las chicas Fx.

Pronto en sus salas de cine.

Les conté a mi familia y a mi pata, de aquella vez cuando salía con una ex, hace más de cinco años, y fuimos a la inauguración de la panadería del barrio. Fuimos por el interés de que nos invitaran panetón y entrar a un sorteo de abarrotes que no ganamos. Estaba casi toda la vecindad dentro del pequeño local que más parecía una disco por que no entraba ni un alfiler, todos esperando que llegue el Párroco local. Cuando entró el susodicho, empezó a lanzar agua bendita como regando el jardín y todos se le acercaban para recibir la bendición gratis. Cuando el tío pasó cerca de mí, levantó el brazo y le sentí un hedor espantoso que nunca podré olvidar, realmente asqueroso, nunca en toda mi vida, ni siquiera dentro de una combi, he sentido olor tan ácido y fuerte a una persona. Y me sorprendía que nadie lo notara, todos se le acercaban al padre como moscas a la mier*a, literalmente hablando. Yo salí espantado de la panadería junto a mi ex que me preguntó por que no me quedé. Acaso no le sentiste el olor a ala del padre?, le dije y me dijo que no. Entonces entendí que tenía un don, un regalo de dios, yo era uno de sus elegidos... era hora de convertirme en un Dragón del 96 (sorry, pero acá no hay cherries para Heroes).

Ahora yo les pregunto... es esto normal? O soy el único fenómeno que se fija en los olores?